Más de 2.500 personas, entre productores, extensionistas y profesionales de la industria y del sector público han participado de las actividades organizadas por el Programa de Extensión Berries Maule, iniciativa que hace dos años ejecuta INIA Raihuén con el financiamiento y apoyo del Gobierno Regional del Maule a través de Fundación para la Innovación Agraria (FIA).
La iniciativa cuenta con siete módulos temáticos instalados en las dependencias de INIA en Villa Alegre, y seis unidades demostrativas en huertos de distintas localidades de la región, además de convenios de colaboración establecidos con distintos centros educativos, INDAP y empresas. De esta manera, el Programa de Extensión de Berries de la región se ha consolidado, tras 24 meses de trabajo, como un punto de referencia obligado para quienes están involucrados en el rubro y quieran actualizar conocimientos de campo y uso de tecnologías.
Entre sus aportes destaca, también, la realización del primer curso de metodologías de extensión agrícola que permitió la formación de 70 asesores técnicos que prestan atención a pequeños agricultores usuarios de INDAP y de empresas.
Además, y respondiendo a las necesidades prácticas de la industria, se está desarrollando un proyecto de innovación FIA para la prospección y validación de nuevas alternativas de berries con variedades de alto valor alimenticio. Así lo resaltó Rodrigo Avilés, Director Regional de INIA Raihuén, quien agradeció la confianza de los actores de la industria depositada en la institución para proyectar al rubro hacia un futuro más sustentable en el corto y mediano plazo.
“Cuando comenzamos esta intervención, los productores y la industria estaban preocupados por las dificultades que enfrentaban y que habían llevado a una baja en su competitividad en los últimos 10 años. Al atacar cada brecha con diferentes soluciones, hoy vemos que el rubro no solo se ha mantenido en toda la región, sino que tiene una visión de desarrollo enfocada en recuperar su sitial de liderazgo, gracias a la incorporación de distintas innovaciones, como nuevas variedades y mejoras en sus sistemas productivos para adaptarse al cambio climático”, dijo Avilés.
En ese mismo sentido, el coordinador FIA para las regiones de Maule y O’Higgins, Robert Giovanetti, destacó que el Programa de Extensión Berries Maule es un aporte a la inversión en capital humano y en innovación, factores esenciales para aumentar la competitividad de las industrias.
“Creo que las proyecciones para el rubro berries son, sin duda, auspiciosas en términos de su desarrollo tecnológico y crecimiento. Este programa está ayudando a cumplir ese nuevo desafío para la fruticultura chilena que dice relación con la necesidad de mejorar los procesos de extensión, capacitación e investigación. Gracias a invertir en capital humano y en innovación es que se aumentará la producción y mejorará la calidad de la fruta. Esta es una tendencia comprobada en muchos rubros y en muchas industrias, y nosotros también estamos caminando en ese sentido en la industria de los berries, gracias a la contribución de este programa”, acotó el coordinador FIA.
Impacto local
Desde el inicio del programa, las autoridades regionales han seguido de cerca y colaborado con las actividades, tales como las semanas temáticas realizadas con cientos de agricultores y técnicos que participaron en charlas, talleres y ferias de tecnologías.
En ese contexto, el aporte del programa a un rubro que es vital para el Maule Sur, fue resaltado por la gobernadora provincial de Linares, María Claudia Jorquera: “Los berries y específicamente la frambuesa, son un eje productivo relevante para un grupo importante de pequeños y medianos productores de diferentes comunas, sobre todo en nuestra provincia. Todo lo que contribuya a trabajar con ellos en materia de desarrollo tecnológico, extensión e innovación, tendrá un importante impacto a nivel de sus familias y, en general, ayudará a mejorar el funcionamiento, rentabilidad y sustentabilidad de esta cadena productiva que es un motor relevante para el Maule Sur”, acotó la gobernadora.
A su vez, la Seremi de Agricultura del Maule, Carolina Torres, recordó que además de la planificación normal del programa, INIA y el Programa de Extensión Berries Maule han sido importante para atender demandas coyunturales. “Los profesionales e investigadores se pusieron a disposición de los productores arandaneros para ayudarlos a recuperar la condición de sus huertos después de haber sufrido una helada en la primavera de 2018. Gracias a ellos dimos respuesta a las demandas de los agricultores al compromiso que asumió el gobierno a través de nuestro ministro”, señaló la Seremi.
Apoyo regional
La autoridad agrícola aprovechó de agradecer al gobierno regional y a los consejeros regionales del Maule por su compromiso con la agricultura y con los productores más pequeños, voluntad que se refleja en varias iniciativas aprobadas, incluyendo este programa.
“Siempre hemos encontrado una buena acogida en los consejeros regionales, el Intendente y los funcionarios del Gobierno Regional. Este programa es un ejemplo de cómo una ayuda bien focalizada y bien pensada puede generar cambios reales en la calidad de vida de las personas. En este caso, mejorando considerablemente la situación de los productores de berries gracias a una mayor dedicación hacia su formación como agricultores, y vinculándonos efectivamente con otros actores de la cadena”, acotó.
El programa comienza su tercer año de funcionamiento concentrando sus esfuerzos en consolidar el trabajo anterior, “de tal forma que una vez terminada la intervención, los agricultores, y en general todos los actores de la cadena, puedan seguir manteniendo esta plataforma de extensión de manera cada vez más autónoma” acotó Rodrigo Avilés Director Regional de INIA Raihuén. “Ello porque van a haber visto que la plataforma es una necesidad para que la industria se siga perfeccionando, y podrán mantener los servicios que ella ofrece ampliándolos a otros productores y tal vez incluso a otros rubros”, agregó.
Fuente: www.fia.cl
