La formación de frutos dobles puede llegar a ser un serio inconveniente comercial en huertos de cerezos, aunque no se dispone en Chile de datos consistentes que revelen la incidencia del problema. Este desorden se ha reportado en diferentes zonas de producción, con predominio en aquellas de clima cálido. En la costa oeste de Estados Unidos se han revelado niveles de daño promedio del 15%, pudiendo llegar al 30%. Estimaciones similares se han reportado también en Japón. La incidencia puede variar dependiendo de la temporada y del cultivar.
El principal factor descrito como responsable de la aparición de frutos dobles sería las altas temperaturas durante el verano previo. Si éstas superan los 33 – 35 °C en enero y febrero, el problema se incrementaría en la siguiente temporada (Figura 1).
La aparición del problema es más frecuente en la cara poniente y superior del árbol, donde las yemas están más expuesta a las altas temperaturas estivales.
EL INICIO DEL PROBLEMA
Estudios moleculares hacen referencia a la activación de factores de transcripción, que podrían derivar en la formación de frutos dobles. La anomalía se induciría durante el verano, puesto que es el periodo en que ocurre la diferenciación floral de la siguiente temporada.
La inducción floral del cerezo ocurriría en Chile a comienzos de enero. La posterior diferenciación de los tejidos tardaría entre 86 – 122 días, siendo el periodo de mayor sensibilidad para la formación de frutos dobles el momento en que la yema avanza en su desarrollo desde sépalo a pétalo (Figuras 2 y 3). Se ha observado una diferencia en la sensibilidad varietal a la aparición de frutos dobles, figurando Sweetheart, Bing, Lapins, Stella, Burlat y Sylvia entre las más afectadas. No obstante, la sensibilidad pareciera depender también de las condiciones ambientales de la ubicación geográfica de los huertos.
La tabla 1 muestra la sensibilidad de formación de frutos dobles en distintos cultivares de cerezas producidos en diferentes zonas del mundo, donde se observa que una misma variedad puede ser más o menos susceptible, dependiendo del lugar donde se cultiva.
Asimismo, el uso de portainjertos más débiles, como los más enanizantes de la serie Gisela, causarían un mayor potencial de frutos dobles. Sin embargo, cuando se utilizan portainjertos vigorosos, pero su efecto se ve debilitado por un mal manejo o porque en forma natural se estresan más fácilmente en verano, como Colt, también se podría aumentar la incidencia del problema. Los patrones Mahaleb, Ma×Ma 14 y Ma×Ma 60, soportarían mejor las condiciones estresantes del verano.
MANEJOS RECOMENDADOS
Teniendo presente lo señalado, para reducir la aparición de frutos dobles, especialmente en cultivares sensibles, deben tenerse en cuenta las siguientes consideraciones y manejos:
Mantener durante el verano un adecuado estado hídrico de las plantas, no descuidando el riego. Por ello, suelos con menos capacidad de retención de humedad deben ser monitoreados con más frecuencia. Asimismo, sistemas de riego localizados, como el de goteo, podrían acentuar el problema, comparado con riegos más extensivos, como microaspersión.
Mantener una adecuada nutrición mineral de la planta, en especial de potasio, elemento esencial para una mejor transpiración.
Uso de mulch y enmiendas orgánicas, para un mejor crecimiento de raíces y mayor retención de humedad del suelo.
Las aplicaciones de ácido giberélico reducirían la incidencia de los frutos dobles. Contrariamente, benziladenina y etephon lo incrementarían.
Uso de caolinas en el periodo de postcosecha, considerando dos aplicaciones al 2,5%. Con alta cobertura del producto se puede reducir la temperatura foliar entre 3 – 5 °C.
Velar por el debido cuidado sanitario de las plantas, a fin de mantener un follaje activo y transpirando. Especialmente dañino sería el ataque de arañitas, entre otros. Se ha reportado que el uso de caolina sugerido en el punto anterior, aumentaría la presión de arañitas.
Un adecuado desarrollo del follaje es requerido, por lo que plantaciones más densas e intensivas podrían presentar más incidencia.
Fuente: www.mundoagro.cl